Pues sí, tras varios años aguantándonos y casi un par viviendo juntos hemos decidido casarnos... que sí, que sí, que lo tenemos claro, lo hemos pensado y evaluado los pros y los contras, así que: ¡¡¡TENÉIS BODAAA!!!.
Las reacciones han sido muy variadas y contradictorias, algunas de las personas que creías mostrarían gozo se han quedado estupefactas, hay amigos (pocos) que han reaccionado de forma fría, amigos (la mayoría) que han reaccionado con alegría y de forma natural y amigos (muchos) que han reaccionado con auténtica efusividad.
Hay quien nos suelta el típico "no me sorprende, vosotros sois de esos", lo cual no sabemos muy bien cómo tomarlo porque no sabemos qué es ser "de esos".. ¿es malo casarse? ¿es bueno?... ¡a saber!.
Por el lado contrario tenemos reacciones de sorpresa absoluta y que terminan con un "¿en serio? vaya, pues no os hacía de esos" (nótese la utilización de nuevo de las expresión "de esos"), frase que nos da un poco de risa y nos hace pensar que ciertamente nosotros tampoco nos veíamos buscando vestido blanco, restaurante, padrinos, madrinas y demás... pero bueno, la vida es así y de repente bebes del agua que dijiste que jamás beberías.
Y por último están las reacciones que más nos han gustado. Las de sorpresa y alegría... las miradas de "me estás tomando el pelo" y seguidas de carcajadas. Esas son las reacciones que más nos han divertido y llegado al corazoncito.
Mucha gente nos pregunta las razones de nuestra boda tras llevar un par de años de convivencia y la respuesta es precisamente esa, que ya llevamos un par de años viviendo juntos, tenemos muchas cosas compartidas y queremos seguir teniéndolas, tanto que quizás algún día seamos tres... de modo que queremos hacer las cosas un poco más fáciles, dejar que el tiempo sea quien decida si envejeceremos juntos o nos separaremos, pero ante todo hacer que nadie salga perdiendo ahora que aún podemos.
Hablando con gente nos preguntan por qué nos casmos por la Iglesia, nosotros que nunca vamos... Eso es muy sencillo de responder: se trata un acto de amor hacia nuestras familias, porque como dijo un buen amigo (gracias Raúl, sin saberlo diste con la frase perfecta para describir nuestra forma de pensar) para nosotros supone un pequeño detalle y para nuestros padres es todo un mundo.
Y ahora que ya hemos superado todas las conversaciones que han ido repitiéndose a lo largo de estos meses vamos a lo que realmente interesa: La boda.
Nos casamos en La Parroquia de San Andrés y San Pedro de Las Bayas, el día 21 de mayo de 2011. Dentro de 6 meses, ¡así que nadie diga luego que no fue publicado!.
Nos gustaría invitar a todas y cada una de las personas que han sido importantes en algún momento de nuestras vidas, pero tememos que será imposible, así que nos limitaremos al presente y el pasado más cercano. Si alguien queda fuera prometemos invitarle a cenar un día en casa (y no es broma).
En fin, hasta aquí llega la primera parte de la historia de nuestra boda... ni que decir tiene que este blog no es por afán de tener una vida pública, si no porque ¡qué narices! no todos los días nos casamos y si con nuestra experiencia alguno de nuestros amigos se anima... jejejej. No, en serio, ésta es una forma más de compartir y tener un recuerdo de este momento de nuestra vida, que aunque la gente se empeñe en hacer que parezca cursi y ñoño, también puede ser divertido.